Desde Suiza, con amor
A principios de los años cincuenta, Ruth Handler estaba viendo cómo jugaba su hija Bárbara con unas muñecas recortables y se dio cuenta de que les asignaba papeles de adulto. Era algo curioso porque, en aquella época, la mayor parte de las muñecas infantiles representaban a bebés o a niños pequeños.
Entusiasmada con su observación, Ruth le sugirió a su marido la idea de fabricar una muñeca con cuerpo adulto. Su marido Elliot, trabajaba como alto ejecutivo en la empresa de juguetes Mattel. Pero ni Elliot ni los directores de Mattel mostraron el menor entusiasmo por la ocurrencia.
Y no pasó nada hasta después de las vacaciones de verano de los Handler en Suiza en 1956, donde Ruth se fijó en una muñeca de aspecto extraño expuesta en el escaparate de un estanco. La muñeca medía casi treinta centímetros de alto, tenía el pelo rubio platino, las piernas largas y un busto sorprendentemente generoso. Se llamaba Bild Lilli.
Aunque Ruth no lo supiera en aquel momento (no hablaba alemán), la muñeca en realidad era un sex symbol que compraban principalmente hombres de mediana edad. Por eso se vendía solamente en bares y estancos.
Ruth miró a la rubia Bild Lilli y sintió que era el juguete perfecto para las niñas pequeñas. Compró tres: le regaló una a su hija y llevó las otras dos a Mattel.
El diseño de la muñeca se retocó ligeramente con la ayuda del ingeniero Jack Ryan y la muñeca pasó a llamarse Barbie, en honor a Bárbara, la hija de los Handler.
Barbie hizo su debut en la Feria del Juguete Internacional de Estados Unidos, en Nueva York, el 9 de marzo de 1959, fecha que actualmente se considera como la de su cumpleaños oficial.
Pero Barbie no fue un éxito de la noche a la mañana: la investigación de mercado inicial señaló que algunos padres no estaban contentos con el busto de la muñeca, y la famosa tienda estadounidense Sears al principio se negó a tener un juguete con tales «curvas femeninas». A pesar de ello, se vendieron unas 350.000 Barbies durante el primer año de producción.
Desde entonces, la muñeca se ha convertido en un icono cultural y en uno de los juguetes más populares del mundo.
Las viejas ideas pueden ser reinterpretadas para nuevos mercados. ¿Qué ideas de otros ámbitos podrías aprovechar para innovar en tu propio mercado?